Crecer como testigo de Jehová
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Historia de vida #36 De mis pesadillas sobre armagedón

Hola, tengo 19 años, me crié con un padre testigo de Jehová y desde que era una niña siempre me llevaba a las reuniones y yo iba, pero dentro de mí nunca quería ir, ya que sentía algo chueco en mi corazón al escuchar sobre armagedón y eso me causaba muchísimos insomnios y pesadillas interminables cuando hablaban sobre eso, continuamente soñaba que mi madre y hermanos morían en el armagedón. Mi madre nunca se hizo testigo, estudió por un tiempo, pero nunca se bautizó, aunque a ella le hubiera gustado que sus hijos se hicieran testigos. Mi papá se hizo testigo de Jehová en los años 60. Ahora tiene 81 años. Mi Padre fue expulsado por haberse divorciado de su primera esposa por “diferencias irrenconciliables” y haberse casado con mi madre después. Siguió yendo siempre a las reuniones y después de unos años fue reestablecido.

Por un tiempo dejé de estudiar la Biblia con los testigos, a eso de los 13 años, ya que no me gustaba, hasta que pasé por un acoso sexual de parte de alguien que consideraba mi familia, esa persona no era testigo, pero busqué refugio ante esa situación. Acepté un estudio con una hermana que me daba estudio cuando era niña; mientras ella me daba estudio me enteré que le fue infiel a su esposo y eso cambió todo, finalicé mi estudio y no volví a asistir.

Dos años más tarde volví a tomar un estudio de la Biblia con la hermana que me lo dio por primera vez, llegué a pasar por muchas hermanas y nunca me convencí completamente de nada de eso.

En 2014 una persona me abrió los ojos sobre la religión, era una una prima que cuando era publicadora y empezó a cuestionar algunas cosas a un anciano, ese anciano la citó a solas y le dijo que investigara en páginas apóstatas; ella se quedó algo extrañada de la recomendación, pero le hizo caso y después ella lo confrontó y él le dijo que él hacía tiempo que estaba despierto y que sabía que los tj eran unos farsantes, pero que temía perder a sus familiares, esposa y amistades, hijos , ya que fue criado en la fe. Le dijo a ella que escapara y que se alejara de todo eso, ya que sus familiares cercanos no tenían afiliaciones con la religión y que ella no tenía nada que perder. Él sigue siendo anciano hasta la fecha. Luego otro amigo mío que no es testigo me recomendó que investigara más sobre la organización. Aunque ya antes había escuchado a alguien tratando de abrirme los ojos y esa fue mi hermana, ya que ella fue testigo de Jehová de joven, pero se salió después de ver lo del año 1975 donde se pronunció la llegada del final de los tiempos y a ella la sacaron de la escuela. Mi hermana es inactiva desde los años 80 y ella desprecia la religión, porqué la saco de la escuela y mi padre la puso a hacer faldas y ropa para las hermanas. También por los dogmas sobre armagedón que crearon mucho miedo en ella cuando era más chica.

Volviendo al 2014, mi prima y otro amigo no testigo empezaron a abrirme los ojos y fue tan doloroso que se lo conté a la hermana que me dio estudio y ella me decía que no les hiciera caso, ya que eso eran “tretas de Satanás” para alejarme del camino.
Lo peor de todo era que ella y su hija me daban la sensación de que me celaban con el esposo de su hija y eso se notaba a leguas; ellas me solían tirar indirectas siempre sobre que las mujeres que se meten en un matrimonio tendrán que vérselas con Jehová; yo siempre he sido muy sensitiva y mi intuición me decía que era cierto y un día lo confirmé, ya que él no me hablaba, no niego que me atraía y eso me hacía sentir tan culpable y caí en depresión y le oraba a Dios para que me alejara esa tentación, ya que nunca haría un daño como ese. Sus indirectas cuando me daban estudios de la Biblia me hacían sentir de lo peor. Caí en depresión por esa situación y por quienes me trataron de abrir los ojos y tuve pensamientos suicidas e incluso tenía que tomar pastillas antidepresivas. Estaba desconsolada porque empecé a dudar y por todo eso.

Mi padre sigue siendo testigo y se sigue sintiendo mal con respecto a que no pudo hacernos testigos, pero no nos presiona y nos dejó hacer lo que quisiéramos, le agradezco eso. Él afortunadamente me habla normal y todo. Diría que mi papá no es un tj de esos muy espirituales. Mi padre maldice mucho y no se comporta como un tj muy espiritual.

Hoy sigo luchando con todas esas ideas aprendidas desde niña, porque aunque nunca me haya bautizado, sus doctrinas calaron en mí y estoy luchando por apartarme de todo eso. Las hermanas que me conocieron no me voltean a ver siquiera, ya ni me visitan. Las que creía que eran mis amigas, me voltean la cara y me ignoran.

Escribí mucho y disculpa , pero tenía todo eso guardado y nunca lo expresé por miedo. En estos momentos sigo luchando a diario, ya que no ha sido fácil para mí descubrir mi bisexualidad y todo lo que mantuve oculto dentro de mí y el miedo a armagedón que sigue un poco latente en mi vida, pero al ver personas que se han sentido como yo, me reconforta y entiendo que no he sido la única y que nadie dijo que el camino sería fácil, pero al menos soy un poco más libre de lo que antes era.
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Gracias por leer.
Atte. P. R.
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