¡Hola! Quisiera compartir mi historia pero no quisiera que pusieras mi nombre, quisiera que fuera lo más confidencial posible. Para serte sincera estoy nerviosa. Ni siquiera sé si quiero que la postees. Lo que pasa es que sigo siendo testigo de Jehová. Pero al menos quisiera que conocieras mi situación. Supongo que el saber que no estoy sola o ayudar me reconforta. Es difícil de explicar la verdad. Mi historia o mi situación es así. Tengo 19 años. Yo fui criada como testigo de Jehová desde niña. Pero me bauticé como Tj a la edad de 16 años, ya creyendo y practicando la religión. Pues aún cuando era niña no la practicaba por completo porque mi madre estuvo expulsada hasta que tuve 8 años y me dejaba ir a las fiestas y demás. La realidad es que la única cosa que no cambié nunca es mis amistades "mundanas" (término de Tj), porque entendía que a pesar de que no fueran Tj eran buenas personas y respetaban mis creencias (es que de verdad no hacían nada malo). Pero llegué a un momento de mi vida que me enfrenté a un momento, digamos de crisis. Hace 2 años me gradué de la escuela superior y me mantuve en comunicación en lo más posible con mis amistades, pero especialmente con un muchacho que no era Tj. Al principio nuestras conversaciones eran normales y poco a poco aumentó el tiempo en que nos veíamos, de cada unos días hasta ser a diario. Recuerdo incluso haber estado enamorada de un chico que era Tj, pero como es obvio jamás me correspondió y con el tiempo y él ingresar a la universidad, lo fui olvidando. Pero bueno, el chico no Tj y yo seguimos estrechando nuestra amistad, hasta que llegó un punto en que locamente empezamos una amistad que yo consideraba como “amigos con privilegios”. No quisiera entrar en detalles, pero para mí fue algo muy loco, de verdad siento que no se lo que estaba pensando. Pero seguimos así juntos sin relación formal establecida, aunque llegué a saber con el tiempo que él se había enamorado de mí y yo, con el tiempo (aunque no lo quisiera aceptar al principio o no me daba cuenta porque estaba un poco confundida), me llegué a enamorar de él. Y entiéndase que todo esto sucedió siendo yo Tj activa, pero créanme que llegué a sentirme muy mal y eso me llevó a confesar a los ancianos y romper mi relación de amistad con privilegios que tenía con el muchacho. Me censuraron porque para ellos estaba arrepentida y de verdad me sentía muy mal, porque me sentía "sucia". Aunque no era la primera vez que me censuraban privadamente por otras situaciones, esta vez fue censura pública. Recuerdo la vergüenza que sentía porque aunque había confesado, me tocó el comité judicial y las preguntas explícitas que mencionan. Luego el tener que confesarle a mi familia; incluso mi abuela Tj me dijo que yo “estaba caliente y que era capaz de coger cualquier hombre y acostarme con él" (algo que jamás haría).
El punto es que empecé a extrañar al muchacho y me di cuenta que le quería. Le llamé y le dije que SI quería ser su novia porque aunque me lo había pedido varias veces, le había dicho que NO por el hecho de no ser Tj. Comenzamos una relación de noviazgo en secreto por internet y celular como cuando eramos amigos y pasaron 2 semanas. Ya en ese punto llegaron los ancianos a mi casa y me preguntaron cómo iba todo y les tuve que decir que estaba de novia con el muchacho. Mi madre lo supo y me hicieron elegir porque yo amaba a Jehová y lo amaba a él y sabía que tenía que dejarlo para continuar, al final lo dejé. Recuerdo lo doloroso que fue andar con el corazón roto. Porque también fue mi primera ruptura con alguien que yo amaba y llegué a pensar que era como si él estuviera muerto porque no lo vería ni le hablaría más, pero sabía perfectamente que estaba vivo. Ni siquiera pude evitar llorar en el mismo momento que le dije que tenía que dejarle ir y él también lloró y lloró muchísimo. Luego pasaron unos días luchando con el dolor que era tan fuerte que ni comer podía, no dejaba de pensar en él. Llegué a pensar en volver con él y lo hice, pero esta vez no iba a dejar que nadie nos separara y me mantuve firme. No fue fácil el primer mes, ya que a mi familia les costó aceptar mi decisión. Mi madre se ablandó y fue porque fuimos al cine con él y su familia para conocernos mejor, incluso él vino a casa a pedir permiso para él venir a verme. Los ancianos hablaron conmigo para que lo dejara, porque “iba a sufrir con él”, porque “para Jehová está mal” y que “podía perder la vida en Armagedón”. Todo casi a la vez en ese mismo periodo de tiempo. Incluso llegué a tener una pesadilla con la gran tribulación porque se había considerado un estudio de La Atalaya acerca de eso. Los nervios era tan fuertes que estaba enferma del estómago; para cuando estuve dejada del muchacho estaba igual o peor, que hasta llegué al hospital para que me pusieran inyecciones y hasta tener dieta por gastritis durante un tiempo.
Estaba enamorada sí, pero tenía demasiado miedo. Empecé mis prácticas del Instituto ya que estaba estudiando una carrera técnica y resulta que mis supervisores de la práctica eran evangélicos pentecostales. Un día por confiar les conté mi problema a ellos acerca de mi noviazgo de diferentes religiones, etc. Ellos me aconsejaron y uno de ellos me dijo: "investiga más tu religión" y me quede con eso en mente. Con el tiempo investigué en internet y me encontré con información "apóstata". Leí de todo y vi de todo. Al principio sentía culpa y cuando leí el libro Crisis de conciencia me dio un nudo en la garganta. Recuerdo también cuando vi algunas escenas de la película "To Verdener", me sentí identificada porque nuestras historias eran iguales, a ella le hicieron la vida imposible y lloré muchísimo. Pero todo eso llego a pasar, sentimientos de indignación también al saber de los asuntos de pedófilos y ahora con el asunto de los inactivos, que ese tema lo comprobaré en la asamblea cuando la tenga en mi país. Muchos sentimientos encontrados. Después de mucho tiempo digamos que "desperté" pero aún así siento que no lo creo. Estoy en un punto neutral y aún no he llegado al punto de querer salirme todavía. Aunque casi lo hago porque recientemente los ancianos vinieron a casa a hablar con mi familia y también a hablar conmigo de los comentarios o las dudas que tenía (porque aunque quise callar no pude), nada grave pasó después de ahí en cuestión a eso. Pero hablaron también de mi noviazgo y le dijeron a mi madre en otras palabras que tenía culpa porque estaba permitiendo que yo estuviera viendo a mi novio en mi casa. Eso resultó en que mi madre tomo la decisión de que no quería verlo más en casa y que no lo volviera a ver nunca más. Pero yo me resistí a eso y decidí que no iba a dejarle, aunque pasó 1 semana para que yo me decidiera por mis pantalones a visitar la casa de mi novio. Aunque discutí con mi familia una y otra vez no cambiaron de opinión. Pero sabía que esto iba a pasar algún día, tarde o temprano. Por lo menos, sé que me siento más tranquila al visitarle a él ya que no tenemos que estar dándonos cariño a escondidas y tenemos más privacidad. A estás alturas no lo quieren en casa por ser diferente pero yo lo amo como persona y hemos durado 11 meses. Incluso llegué a pensar que no duraríamos como relación, pero aquí estamos porque respetamos nuestras religiones, de hecho él nunca me ha obligado a nada que yo no quisiera hacer como Tj. Pero para eso tuve que cambiar mi manera de pensar y alejar los miedos y las culpas. Y todo gracias al internet que me hizo ver que nada era tan malo como parecía y que toda religión que dice ser "la verdad" puede ser puesta a prueba. Y aunque todavía me falta mucho por investigar por mi cuenta todavía, no creo salirme de los Tj. Porque como sabes el adoctrinamiento es tan fuerte que no sabes quién dice la verdad y quién no. No puedes cuestionar. Te preguntas si Dios estará en otras religiones, si Dios te ama por lo que estás haciendo, etc. También el miedo de todos, de perder a tu familia o tus círculos de apoyo. Aunque también mi novio me ha apoyado mucho y él dice que si llegara a salirme lo tengo a él y a su familia. Pero no es tan fácil como cambiarse de medias. De hecho, si todo sigue bien, planeamos casarnos después que él termine de estudiar la universidad, aproximadamente en 2 o 3 años. Él me ama y me ha tratado como una princesa. Mi suegra llegó hasta a decirme: “él es un muchacho bueno, qué más quieren!” Pero todos sabemos qué es lo que quieren. Solo espero tomar la mejor decisión algún día si me tocará decidir y estar con las personas que amo. Hoy, soy solo una Testigo de Jehová censurada y confundida.
De verdad no le deseo esto a nadie. Y sé que esto es un foro ex-testigo. Pero sentí que debí contarlo. Quizás no lo publiques porque soy una Tj que piensa casi como uno, pero que ha pasado por lo que le ha pasado a muchos que se han enamorado de Testigos de Jehová; los problemas que surgen porque todos los de adentro piensan que estás mal al enamorarte de alguien que no es de tu religión. Y también los sentimientos que se te vienen cuando descubres las posibles contradicciones de esta organización religiosa. Quizás mi historia es bastante tonta. Pero escribí intentando desahogarme, por lo menos quisiera saber tu opinión. Me siento hasta extraña escribiendo estas cosas.